lunes, 19 de febrero de 2018

crecido a caballo



¿Veis la pierna izquierda de Travis? Tiene la rodilla subida a la altura del pomo, plegada la pierna, los brazos apoyados sobre ella, viene de haber estado cabalgando un rato largo, no sabemos cuanto, pero podemos imaginar que son días y días, y cuando al fin llega a la ciudad no se baja, se puede pensar que es porque hay un poco de tensión, pero también se puede pensar que no, que en realidad para él estar a caballo es más natural que estar de pie, es un poco centauro él, y entonces su manera de descansar es esa, cambiar la postura en el caballo, subir la pierna, y hay en ello una forma de elegancia, una naturalidad, y es que Ben Johnson, el actor, era de veras un poco centauro, era más jinete que actor, hasta llegó a ser campeón del mundo de rodeo, o eso dijo, antes de ser actor fue especialista, se le nota que creció a caballo, hay que ver cómo galopa, a lo mejor me equivoco pero me da la sensación de que como es él el que de veras galopa Ford lo puede filmar de más cerca, o desde un ángulo mejor, nunca se vio tan bien a un jinete galopando, y aún más bonito que los planos al galope es ese plano en el que tras quitarle la montura y las riendas al caballo se sube a él en un gesto que no parece ni un salto, simplemente se eleva, de pronto está sobre él y le guía así, a pelo, más centauro que nunca, hasta el río, y la película también va de eso, de su elegancia a caballo y de su elegancia a pie, da igual lo que haga, y la elegancia en este caso sería ese estar en acuerdo con el mundo en el que vive, el mundo de los caballos y del desierto, la naturalidad del gesto justo y también la naturalidad de saber reconocer el momento justo, ni demasiado pronto ni demasiado tarde, hay que verle decidir que se va de cortejo, Sandy, I think I'll go a-courting, o el momento justo para arriesgarse a un tiroteo, la paciencia y la rapidez, dejar venir las cosas y no dejarlas irse, eso que parece que no tiene su amigo Sandy, que tiene otra cosa, una gracia desgarbada, un sentido de lo justo y de lo injusto, pero que sin el sentido del momento de Travis sin duda ya estaría muerto por alguno de esos desiertos de dios, aunque bien pensado el famoso tiroteo lo acierta a empezar Sandy en el momento justo, pero también es porque Travis ha sabido hacerle esperar, sí, se puede decir que Sandy, a su manera, va en camino de saber reconocer el momento justo, va en camino de aprender la paciencia y la rapidez, que quizás a Travis le haya venido, quién sabe, por la larga compañía de los caballos, por el largo aprendizaje de hacer y dejar hacer a caballo. 
(Wagon Master, John Ford)

No hay comentarios:

Publicar un comentario